martes, 7 de febrero de 2012

odio (de que otra forma podría llamarse)

te odio,
tanto como puede odiarse a un ser amado,
tanto como pueda odiarme yo mismo.

odio verte sonreir,
odio saber que puedes estar sin mi,
odio aún mas, que no necesitas fingir.

te odio tanto como tu me odiaste,
odio la simple ausencia de tu piel,
odio el hecho de no poder odiarte,

odio que el odio pierda sentido,
y el simple concepto de tu palabra,
escrita, e incluso hablada.

odio extrañarte cuando no existe razón en mi sentido,
e incluso en mi mayor lucidez,
odio el hecho de nunca haberte amado,
y aún así, necesitarte tanto.

odio como nada en mi existir,
la maldita necesidad de besarte que no tiene origen ni fin,

odio no poder ser un buen poeta,
incluso si estoy contigo.

pero lo que más odio,
es no tener un puto cigarrillo